Taltal



Taltal
Del texto Das Departement Taltal (Chile)
L.Darapsky
Berlín 1900. Dietrich Reimer (Ernst Vohsen)

Se deriva del nombre de los gallinazos, Athartes Urubus.
Los Taltales o gallinazos. El etimologista Pebres, indica la palabra Thalthal como procedente del mapuche, ave o buharro; Rodolfo Lenz le asigna la significación de gallinazo.
La referencia histórica más antigua se encuentra en el Padre Diego de Rosales, en su HISTÓRICA RELACIÓN DEL REINO DE CHILE, tomo I, pág. 318, año de 1666.
Sady Zañartu Bustos, indica que correspondería su significado al grito de las gaviotas.
Max Uhie indica que es de origen atacameño y su significado es descenso.
El lugar geográfico de la acepción corresponde a la Punta de Taltales (La Puntilla). El topónimo Punta de Taltales, gallinazos o jotes, corresponderían efectivamente a un ave carroñera conocida como traro o carancho (Polyborus Planeas) que habita preferentemente donde existen colonias de lobos de mar.
Morro Colorado, Punta Morada, La Puntilla, Paposo, Llano de Hueso Parado y muchos otros lugares son mudo testigo de la presencia remota de los primeros habitantes de la costa de Taltal, en los cuales es posible evidenciar aún los grandes depósitos de conchas o basurales de cocina comúnmente conocidos como conchales.
Los orígenes del hombre en Taltal se remontan desde hace seis mil años y es posible pensar que sea más temprano aún.
Estos grupos humanos que poblaron la costa de Taltal y sus alrededores, poseían técnicas bastante refinadas para la confección de instrumentos y herramientas para su uso en la pesca, caza y recolección, como son los anzuelos de concha, grandes cuchillos taltalensis, arpones, cordonería y chinguillos.
En tiempos más tardíos aparece la balsa de cuero de lobo en la cual fueron eximios navegantes y cazadores, tal como lo evidencian las escenas de pesca pintadas en paredes de quebradas y aleros rocosos.
Con la llegada de los primeros hispanos se le denomina changos a los habitantes de la costa norte de Chile.
El legado de sus embarcaciones perduró hasta fines del siglo pasado las que se utilizaban para el embarque de salitre a los barcos surto en la bahía.
Narración efectuada por Maximino Villarroel Olivares.
 Ex Director del Museo Augusto Capdeville R. de Taltal.